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M.

M.

Hoy quiero dar a conocer mi testimonio, no sólo en el plano de los sentimientos sino dar a conocer la efectividad de los tratamientos y técnicas de Marta.

Soy paciente suya desde hacer unos años y he de decir que sin su intervención no se donde estaría en estos momentos.

Mi situación desde hace un año ha sido y está siendo muy difícil a nivel emocional y lógicamente ello ha afectado de forma notoria a mi salud.

Llevo muchos meses con infecciones recurrentes, he estado en urgencias cuatro veces en los últimos meses y he estado en varios especialistas. He tomado antibióticos distintos y ninguno me ha hecho efecto.

Lo único que me ha ayudado son las técnicas de Marta, los consejos que me ha dado, los imanes que estratégicamente me ha ido poniendo y sus flores en gotas.

En el mes de junio me casé y cuando más feliz debía estar con los preparativos, 5 días antes de la boda estaba en urgencias. Ella me ayudó muchísimo cuando tres días antes acudía a su consulta, no solo salí con ánimo renovado sino que me sentía mucho mejor a nivel físico. Gracias a su intervención el día de la boda pude disfrutarlo y no sólo eso, me enfrentaba aun viaje de 17 días fuera de España y estaba aterrorizada la sanidad no es lo mismo en España que en Tailandia o Maldivas.

Su fuerza, sus consejos ,me ayudarán inmensamente durante todo el viaje, de hecho en mi corazón viajaba conmigo.

Ir a su consulta es salir relajada, en paz, con los efectos físicos de dolor mitigados, con ánimo renovado, con ilusión.

Efectivamente en el día a día debemos poner en práctica sus consejos, técnicas, ir superando los obstáculos porque aunque Marta es un ángel, inconscientemente la situación la hemos generado nosotros sin darnos cuenta y es fundamental ese DARSE CUENTA para avanzar y seguir adelante.

Su ejemplo me está ensañando muchísimo, y lo que me quedo es que lo importante es lo que damos no lo que nos dan. He puesto en práctica lo que siempre nos dice Marta, ” preocuparos por lo que dais” y tiene muchísima razón, no hay cosa mejor hecha que lo que hacemos por nuestro bienestar por encima de todo y de todos, la paz que reporta es tan maravillosa que compensa el dejar de lado las razones, las justificaciones y las opiniones de los demás.

Gracias de corazón por enseñarme tanto, por sanarme y por enseñarme con tú ejemplo y dedicación.